martes, 9 de diciembre de 2008

POSTRES DE NAVIDAD


Es rara la casa que en estos días no preparan sus propios dulces. Unos hacen rosquillos, otros polvorones y la gran mayoría hacen pestiños. Cada región, cada ciudad, cada pueblo, cada casa tiene una forma distinta de hacerlos. Así que, ahí va como se hace en mi casa. No es por alardear, pero son los mejores. No temo que alguna industria me la robe. Si alguien toma esta receta y la hace, quiero que al menos me diga en un comentario que tal le fue.
INGREDIENTES:

1 Kilo de harina de repostería
1 Sobrecito de levadura Royal
1 Vaso de vino blanco (aprox. ¼ litro)
1 Copita de Anís dulce
1 Cucharada sopera de Ajolín
Ralladura de un limón
1 Vasito pequeño de zumo de naranja natural.
1 Naranja
Aceite de Oliva suave
½ Kilo de Miel*
1 Kilo de azúcar*


ELABORACIÓN:

Se vuelca la harina en un recipiente tipo lebrillo, con espacio suficiente para amasar.

En una sartén se fríe el ajolín y una naranja partida en cuatro trozos hasta el punto de dorado del ajolín en una cantidad de 1/4 de vaso de aceite. Una vez que éstos estén fritos, se deja enfriar el aceite.

Cuando el aceite está templado a frio se vuelca en el recipiente de la harina junto con el vaso de vino, la copita de anís, el ajolín, el sobre de levadura, el vaso pequeño de zumo de naranja y la ralladura de limón. No echar la naranja frita, aunque sí exprimir ésta.

Todo esto se amasa bien haciendo una masa homogénea. El punto exacto de la masa se determina por su consistencia. No debe pegarse en las manos. Se debe tomar un poco de masa, (un pellizco) hacer una especie de fideo entre las manos, cogerlo por los extremos y tratar de extenderlo. Su punto debe ser cuando este se rompe después de haber alcanzado uno o dos centímetros más.

Dejar aproximadamente ½ hora tapado con un paño de cocina para que la levadura haga su efecto.

Se van partiendo trozos de masa de aproximadamente 3 centímetros de diámetro y se extiende con un rodillo hasta que quede de un grosor de unos 2 ó 3 milímetros. Se solapan, como se ve en la fotografía y se fríen en abundante aceite.

Se pueden terminar de preparar con azúcar, echándolos directamente de la sartén a un recipiente de azúcar y apartar en una fuente.
O bien con miel. Diluir ésta en un recipiente con ¼ litro de agua al fuego y remover hasta conseguir que quede el líquido uniforme. Una vez conseguido, se aparta del fuego y actuar como con el azúcar.

No hay comentarios: